Puro Corazón de IG Paraje Altamira
Nuestro Proyecto
Finca Las Glicinas es un proyecto familiar de vinos que buscan expresar al máximo su terroir.
Nos enfocamos en hacer sólo los vinos que nos gustan.
Somos una empresa familiar dedicada a la producción de uvas y elaboración de vinos de sectores seleccionados de nuestro propio terruño.
Nuestros viñedos se encuentran ubicados en el Paraje Altamira, Valle de Uco, San Carlos, Provincia de Mendoza.
Nuestros vinos característicos son Malbec, Cabernet Franc, Chardonnay, Semillón y blends con identidad propia. Valoramos los vinos que expresan el arte puro de la tierra.
El Viñedo
Los grandes vinos comienzan en el viñedo. Por eso, el primer objetivo que nos propusimos fue lograr viñedos estabilizados, con una densidad de plantación apropiada para cada variedad. El sistema de conducción que utilizamos es el espaldero alto con una orientación norte – sur que permite aprovechar la luz solar.
Utilizamos riego por goteo para optimizar el agua acumulada en las represas, proveniente del deshielo de la cordillera de los Andes.
Nuestros viñedos se ubican en las laderas de la Cordillera de los Andes, a unos 1100 mts de altura y tienen una antigüedad aproximada de 20 años. El suelo profundo y rocoso de origen aluvional, con composiciones calcáreas, le aporta un particular balance al desarrollo de los viñedos.
Nuestra finca alcanza una superficie de 40 Ha, implantada con diversas variedades de uvas, que alcanzan su esplendor en este terroir especial ubicado en el alto Valle de Uco.
Entre las cepas con las que contamos están: Malbec, Cabernet Franc, Cabernet Sauvignon, Petit Verdot, Syrah, Barbera, Ruché, Semillón, Chardonnay, Sauvignon Blanc y Torrontés.
Nuestro Suelo
Calcáreos, profundos y rocosos de origen aluvional
Los suelos de Altamira tienen un origen fluvial antiguo cubierto por depósitos aluviales más jóvenes. Los depósitos fluviales del río Tunuyán tuvieron gran desarrollo durante el Pleistoceno, periodo que abarca desde los 2,5 millones de años a los últimos 12.000 años, época en donde aparece el hombre sobre la tierra. Gracias a la corriente del río Tunuyán estos depósitos fluviales fueron moviéndose “aguas abajo” a lo largo de toda la cuenca.
El suelo del Paraje se caracteriza por la presencia de rocas que sobrepasan en algunos casos los 2m de diámetro. Se presentan de color blanco debido a la intensa cobertura de carbonato de calcio, que pueden llegar a un espesor de hasta 3 mm. Esta cobertura evidencia la edad pleistocena en sedimentos fluviales y marinos.